Mantenimiento del Suelo de Madera Natural
Te estás planteando instalar suelo de parquet natural en casa, pero… ¿conoces las recomendaciones para su posterior mantenimiento? En este artículo te lo explicamos breve y fácilmente.
Una ventaja de la tarima de madera natural con respecto a los suelos de parquet laminados o vinílicos es que pueden ser lijados y barnizados para volver a su estado original como el primer día. Este mantenimiento se suele realizar cada 10 ó 15 años.
El parquet o suelo de madera natural re quiere una serie de cuidados regulares en el tiempo, si bien no suelen ser muy costosos. Estos cuidados nos permitirán disfrutar de un parquet reluciente durante mucho más tiempo.
El parquet de madera natural, por su naturaleza y debido a los cambios de humedad y temperatura en el ambiente, se dilata y contrae modificando sus dimensiones, lo que puede llegar a provocar su deterioro si no se toman una serie de precauciones:
- Procurar mantener unas condiciones medioambientales correctas y estables para la madera natural, que se consideran: una humedad relativa de entre el 45% y 65% y una temperatura aproximada de 20 ºC. Podemos utilizar una pequeña estación meteorológica para controlar estos valores.
- Un ambiente demasiado húmedo provoca la dilatación de la madera del parquet aumentando sus dimensiones, lo que acaba eliminando la junta de dilatación perimetral (debajo del zócalo), tocándo la pared y levantándose. En estas situaciones se recomienda ventilar de forma regular, usar la calefacción de forma pautada y/o colocar un deshumidificador.
- Un ambiente demasiado seco (provocado por las altas temperaturas del verano o por un uso intensivo del aire acondicionado o la calefacción) provoca la desecación y la aparición de grietas en el suelo. En este caso podemos usar recipientes con agua en diferentes lugares del hogar, llenar la bañera o usar un humidificador.
- Se ha de tener en cuenta que los rayos del sol no incidan directamente y durante prolongado tiempo sobre el parquet natural. Esto provoca su oscurecimiento prematuro a través de un proceso de oxidación que la afea y estropean más.
- Evitar en lo posible pisar el parquet con el calzado de calle, especialmente si se encuentra mojado o tiene enganchados restos de gravilla, tierra, barro… muy perjudiciales para el parquet. Esto se soluciona con la colocación de una alfombrilla en la puerta de entrada para retener arcilla o piedrecitas. Se ha de mantener especial cuidado con los zapatos de tacón fino, pues pueden marcar el suelo, sobre todo si tienen las tapas quitadas.
- Las manchas se han de limpiar utilizando una mopa o fregona ligeramente húmeda. Hay disponibles en las droguerías productos específicos para la limpieza y el mantenimiento del parquet.
- Las manchas líquidas se han de limpiar y secar de forma inmediata, ya que pueden ser absorbidas por la madera y dejar la marca de la mancha de forma permanente. Una buena forma de asegurarse una total y correcta limpieza es utilizar un secador de pelo, teniendo cuidado de no quemar la madera, para limpiar y secar el líquido que haya podido penetrar entre los huecos y aberturas de la madera natural.
- Es importante evitar los golpes y roces con objetos duros o puntiagudos. Una recomendación es colocar fieltro adhesivo en las patas de los muebles, especialmente las sillas, para que se puedan arrastrar sin que arañen. Estos adhesivos están disponibles en cualquier ferretería o tienda de bricolaje.
Deseamos que estas recomendaciones le sean útiles y disfrute de su parquet natural en óptimas condiciones durante muchos años. En Central Park, como especialistas en colocación y mantenimiento de suelos de parquet, estaremos encantados de atenderle y responder a cualquier duda o consulta al respecto. No dude en contactar con nosotros.